Una de las nuevas montañas resultantes del apilamiento de escombros del antiguo Berlín recibió un nuevo nombre: Teufelsberg, algo que puede sonar bien a oídos del turista a no ser que sepas alemán, en tal caso suena un poco siniestro ya que Teufelsberg se puede traducir como «la Montaña del Diablo«… el lugar donde sin duda hubieran rodado la versión alemana de «El día de la Bestia» en caso de haber existido tal cosa.
No solo los esquiadores y los amantes de las vistas bonitas al atardecer mostraron su interés en la nueva y más alta montaña de Berlín Oeste. Hubo otro grupo muy particular que sintió un gran interés en ese nuevo lugar situado en el sector británico de Berlín: me refiero a la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) norteamericana.
La cima de «La colina«, que es como estos muchachos denominaban a Teufelsberg, esta situada a 115 metros sobre el nivel del mar y a 80 sobre el resto de Berlín, un lugar ideal para plantar una base secreta de escuchas desde la que monitorear todas las comunicaciones de los amigos soviéticos de Berlín Este, el cual estaba situado muy muy cerca. De hecho a Teufelsberg aparte de «The hill» se la conocía popularmente como «La última montaña antes de Moscú«.
Durante un tiempo unidades móviles de escucha se estuvieron moviendo por Berlín buscando el mejor lugar desde el cual escuchar a los «ruskis» y al final decidieron que la cima de Teufelsberg era el lugar desde el cual mejor recepción se tenía, había nacido la que sería una de las primeras y más importantes estaciones de escucha de la Guerra Fría.
Tras este descubrimiento se decidió construir una gran instalación conjunta entre estadounidenses y británicos en su cima y a petición de la NSA se desmontaron los saltos de ski ya que parecían interferir en la recepción de señales… mala suerte para los esquiadores, la guerra nuclear era una amenaza real así que no había tiempo para tonterías.
(Fuente: Aquí. Foto realizada por: neoneo)
A continuación tenéis la foto en 360 grados esféricos.