El gnomon es sin duda el instrumento astronómico más sencillo y antiguo: una simple barra perpendicular al suelo que proyecta su sombra sobre un plano horizontal. Significa palo o bastón en griego. Con tan sencillo aparato, podemos observar cómo se mueve la sombra del gnomon a lo largo del día y cómo varía su longitud a lo largo de las estaciones.
Las hipérbolas dibujadas en el suelo marcan la trayectoria de esa sombra a lo largo de cada día en distintas épocas del año. La curva más próxima al gnomon corresponde al recorrido de la sombra durante el solsticio de verano, cuando el Sol alcanza mayor altura sobre el horizonte; por eso la sombra es la más corta de todas. En cambio, la más larga corresponde al solsticio de invierno, cuando el Sol está más bajo.
El gnomon puede ser utilizado también como calendario y reloj solar. La prolongación de cada línea hacia el Este y el Oeste nos señala el lugar por donde sale y se pone el Sol a lo largo del año. Este lugar solo coincide con estos puntos cardinales en los equinoccios, cuando el día y la noche tienen la misma duración. La línea que recorre la sombra del gnomon durante ese día no es una hipérbola, sino una línea recta.
(Fuente: Aquí)
A continuación tenéis la foto en 360 grados esféricos que hicimos durante nuestro viaje por Valencia.