La visita a San Pedro, la iglesia más antigua de Múnich, incluye un segundo elemento de interés más allá de la religión o el arte. Se trata del mirador panorámico situado en lo alto de la torre, el cual nos regala unas fantásticas vistas panorámicas que incluyen Marienplatz y el centro histórico, pero también el resto de la ciudad, el Allianz Arena o, en días despejados, los Alpes.

Con una altura de 91 metros, el mirador de la torre de San Pedro ofrece una de las mejores vistas panorámicas de la ciudad, por el módico precio de 2 euros (tarifa 2014). Permite una panorámica inmejorable del centro histórico, con el Neues Rathaus o Nuevo Ayuntamiento y la catedral en primer plano. También se avistan el resto de barrios, con el río Isar, el parque Olímpico o el Allianz Arena al norte.

Además, en los días soleados o con nubes altas se pueden contemplar fácilmente los Alpes en la lejanía, rompiendo la planicie sobre la que se asienta Múnich y las localidades vecinas.

Eso sí, si bien la visita es recomendable por las vistas desde las alturas y el precio es económico, el visitante ha de tener en cuenta que solo hay un camino para subir a la torre: superar sus poco más de 300 escalones, en unas escaleras angostas y generalmente concurridas de turistas, especialmente en los meses de primavera y verano.

Otras buenas vistas las tenemos en las torres de la catedral, el Ayuntamiento o la torre olímpica.

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